IMMORTAL + HYPOCRISY + ECZEMA – Viernes 19 de abril de 2002, Sala Arena (Madrid)

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Desde hacía varios meses se anunciaba un cartel con varios grupos de intensos sonidos extremos. Al final, el cartel se configuraba con tres bandas: los ingleses Seeds of Desolation, los suecos Hypocrisy y los noruegos Immortal.

Llego al recinto sobre las 19.45 y me encuentro, antes de entrar, en la puerta del local, un pequeño cartel que anunciaba que el combo de Death, Seeds of desolation no tocaba por haberse quedado sin batería durante la gira. Su puesto era ocupado por los madrileños ECZEMA.

Cuando me introduzco en la sala percibo que la primera actuación que estaba programada para las 20.00 horas ya había dado comienzo. Era la segunda vez que tenía oportunidad de ver al trío formado por Pablo (bajista), Dario (guitarra y voz) e Iván (guitarra y voz). Desde que el batería Dani marchó a Saratoga, no han encontrado un sustituto digno tras los tambores, supliendo este instrumento con batería pregrabada. Llevan alrededor de ocho años batallando en el underground musical y su última obra (cuarta en su carrera), “Soledad, el llanto de la muerte” la pusieron en circulación hace unos cuantos meses.

De la actuación de Eczema presencié el final de un tema y los dos últimos (“Eterna” y “Tiempo inútil”). La puesta en escena del grupo queda un poco desangelada por lo que he comentado anteriormente de la falta de batería. El bajista se coloca en el centro del escenario y los guitarristas, que se reparten la labor de las voces, a ambos extremos. Reseñar las muescas y caretos que pone uno de los guitarras en el desarrollo de los temas, una risa, parece que está loco y poseido. Los temas son bastantes extensos en su duración, con muchos cambios de ritmo y ambientes. Te puedes encontrar con toques de Black, Death, Doom, Thrash, … en una misma canción.

HYPOCRISY

Alrededor de las 20.30 se apagaron las luces y salen para ocupar sus posiciones el batería Lars Szöke, el bajista Mikael Hedlund , el guitarrista de apoyo en directo Mattias Kamijo y por último, el líder de una de las principales e históricas bandas de Death Metal de la vieja Europa, el señor Peter Tägtgren (guitarra y voz). El comienzo es con “Fractured Millennium”. Luces rojas que ambientan la horrible sala como si fuera el infierno, efecto de humo en escena, Peter Tägtgren, pelo al viento por efecto de un ventilador, liderando en el centro a la banda y escupiendo sus letras con rabia. Primer mosher de la noche.

Saludo a la concurrencia y primer tema de su último CD criticado por los puristas del Death (“Catch 22”), el veloz “Don´t Judge Me” seguido sin parar con “A Public Puppet”, también perteneciente a su trabajo editado en el 2.002. La música que salía por los altavoces se volvía una bola ruidosa en las partes y temas más cañeros, demasiada saturación en las guitarras. Teclas y efectos sonoros pregrabados dan inicio al principio ambiental de “Apocalypse”, acompañado de luces azules .

Además de temas de trabajos anteriores (“Penetralia”, “Osculum obscenum”…) tocaron el reciente “Destroyed” y finalizaron con el excelente “Roswell 47” y “Final Chapter”, oyéndose la voz a duras penas. Acabando la actuación a las 21.20.

Es una lástima que el sonido no acompañara a la descarga de la banda, porque cumplieron con creces. Pero lo malo de un concierto de este tipo de música es que si no se dispone de buena calidad sonora hay momentos en los que padeces mucho, por llegar a tus oidos ruido y apenas pudiendo distinguir los temas que suenan.

IMMORTAL

El trio noruego se presentaba con una novedad en sus filas. Semanas antes del tour el bajista Iscariah había decidido abandonar la banda por no sentirse capacitado para dar todo de sí a favor del grupo, sustituyéndolo Saroth, que entre otras formaciones acompaña en vivo a Pain (proyecto de Peter Tägtgren), al igual que el batería Horgh.

Con esa formación (Abbath – guitarra y voz, Horgh – batería y Saroth – bajo) se presentaban de nuevo por territorio hispano para promocionar su magnífico “Sons of northern darkness”.

Faltando 15 minutos para las 22 horas, y con un telón negro con la I en grande y blanco del logo del grupo, tomaron las tablas los tres pintados y oscuros noruegos. Abbath fue el último en salir con toda su ropa de batalla y colocándose en el extremo izquierdo del escenario empiezan con “Wrath From Above” del “Damned in black” y otro corte más de ese disco, el que le da título, “Damned In Black” y comenzaban los moshers a tomar el escenario..

No nos hacen esperar mucho en oir algo de “Sons of northern darkness”, el primer tema “One By One”. El bajista Saroth estático, con una cara de pocos amigos y con el rostro entero pintado de blanco, excepto unas lineas en negro que le cubrían el contorno de los ojos y se extendían hacia las sienes. El sonido había mejorado levemente con respecto a Hypocrisy, ¿quizás por no llevar dos guitarras?.

Saludos de Abbath y cachondeo al decir a caso hecho Milán en vez de Madrid, dando paso a “Solarfall” de su antepenúltimo disco, “At the heart of winter”. Comprobando que la mayoría del set list era compuesto por temas de sus más recientes trabajos. Vuelta al último Cd, con el rapidísimo “Sons Of Northern Darkness”, seguido (como en el estudio) por otro tema de nueva factura, el cadencioso “Tyrants”, con parón a mitad de la ejecución para que la gente grite y alze los brazos. El guitarra y voz no paraba de moverse, desplazándose al lado de Saroth cuando eran las partes instrumentales.

“Withstand The Fall Of Time” da paso a que se queden la batería y el bajo sonando y que al rato aparezca Abbath con una antorcha y realice su número de comefuegos lanzando al aire unas cuatro o cinco bocanadas de fuego. Tras el espectáculo, 22.34, se marchan del escenario.

A las 22.36 vuelven a salir tras los insistentes gritos del público y suena ruido de mar, iniciando “Beyond The North Waves”, último tema en el CD y también último a su repaso del reciente trabajo.

Y como colofón dos temas ya históricos y de sonido totalmente Black de su “Battles In The North”, el que da título al disco y “Blashyrkh (Mighty Ravendark)”, con esos arpegios de guitarra al final que quedan tan bien.

Intensa actuación de los buenísimos y magníficos Immortal, pero demasiado corta, una hora escasa. Fué visto y no visto.

En mayo saltan el charco y girarán con Manowar y Catastrophic, para volver en verano a territorio europeo y participar en algunos festivales.

Texto: Starbreaker