TONY IOMMI. Ironman, my journey through Heaven and Hell with Black Sabbath (2012)

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tonyiommi_ironmanTony Iommi no podría dejar de contar su versión de la historia de Black Sabbath, después de que lo hiciera Ozzy. Tony nos ofrece un nuevo enfoque a su historia, muy diferente al de Ozzy.

Tony es un italiano nacido en Inglaterra. Sus padres tenían una fábrica de helados, con tienda, católico no practicante. De hecho, la furgoneta del negocio de los Iommi será crucial en los primeros momentos de la vida de Black Sabbath, ya que se convirtió en la furgo de la banda. Tony, a diferencia de Ozzy, es un tipo trabajador, dinámico y nos cuenta su vida antes de decidirse por la música como medio de vida. Nos cuenta cómo el mismo día que toma la decisión, tendrá el accidente fatal que le llevará a perder parte de sus dedos de su mano derecha. Nos cuenta sobre su crisis de ánimos hasta que por fin, retomó su línea, creó sus primeras prótesis, como buen artesano que era y reaprendió a tocar la guitarra. Y como Iommi no tenía sensibilidad en las falanges al tener las prótesis, decidió que su música sería más dura, y con esta decisión nació el Heavy Metal. Aunque como reconoce, sus orígenes están en “Helter Skelter” de los Beatles, que fueron los primeros en hacer un rock duro.

Iommi nos cuenta sobre el concierto que dieron por los Tull y por qué no se casó con esta banda que le hubiera encumbrado a la cima, sin el esfuerzo que tuvo que realizar con Sabbath. Pero lo cierto es que hizo una sola comparecencia con Tull, en el Circo de los Rolling Stones, que se grabó, pero no se publicaría hasta mucho después, pues a los Stones no les había gustado su parte. En este video podemos ver lo que pudo ser la no existencia del Heavy, la única ocasión que Iommi toco con los Tull, pese a no ser definitiva, sirvió al guitarrista para sacar una serie de lecciones que llevó a Black Sabbath.

Tony nos habla de su relación con los diferentes miembros de Black Sabbath a lo largo de la historia de la banda. Nos cuenta como él y Geezer Butler establecieron lo que llama el “muro de sonido”, lo que define a Black Sabbath, así como según dice, lo que define el sonido en los Zeppelin es la batería de John Bonham, amigo y padrino de bodas. Nos comenta sobre su amistad con su amigo a muerte Bill Ward, a quien confiesa, en el capítulo “Ignición” que lo ha quemado en varias ocasiones. Una tarde de grabaciones, Tony le dice: “Bill, me gustaría volver a quemarte” (esto ya implica que hubo quemaduras anteriores) a lo que Bill le responde que en ese momento no le va bien, pero un par de horas más tarde, accede a los gustos piromaníacos de su amigo, ante la estupefacción del productor del disco. Casi le cuesta la pierna a Ward. ¿Quién sabe? quizás esta sea la verdadera razón por la que Bill no haya participado de la nueva etapa de los Sabbath. Porque aunque haya tenido baterías mejores, para Tony no hay otro batería como él, fue su primer batería y lo fue por muchos años. Por esta razón, aceptar a los que vinieron después le ha costado mucho. Así por ejemplo, cuando conoció a Appice, este llegó con un kit de batería muy pequeño, al menos en comparación con el de Ward, lo que echó para atrás a Iommi, que quedó de piedra tras la destreza de Vinny. Pero a la hora de la verdad, en los conciertos, este se presentó con un kit mucho mayor para dejar tranquilo al guitarrista.

También nos cuenta su relación con Dio, y lo diferente que era frente a su relación con Ozzy. Nos cuenta que fue la propia Sharon Arden (Osbourne), quien les presentó a Dio para sustituir a Ozzy, pero en un proyecto diferente. Pero Don Arden no quería oír nada de otros proyectos. Nos cuenta la impresión que le dio cuando Dio se sentó junto a él guitarra en mano, para participar de la creación de la música, dándole ideas para los riffs. Vamos, siendo lo que Ozzy no era, un creativo musical. Y así nació “Heaven and Hell”, el disco que les devolvió a ser la gran banda que fueron diez años antes. Iommi le dijo a Dio que debía abandonar los arcoíris, que hasta entonces habían estado muy presentes en la carrera del cantante. Hicieron “Mob Rules” y con esto acabó la primera etapa de Dio con Sabbath, pues Dio fue tentado para su carrera en solitario.

Entonces fue cuando los Sabbath se cruzaron con otras opciones para cantante y se encontraron con el ex cantante de Deep Purple, Ian Gillan, con el que Iommi quiso hacer un nuevo proyecto, diferente a Sabbath, pues ya no eran la banda original, excepto por él, pero Don Arden no lo permitió. Y así nació “Born Again”, y de su gira nos cuenta Tony que Gillan provocó un altercado en Barcelona.

Nos habla de las demás épocas, como los intentos con otros cantantes como Rob Halford, o músicos de otro tipo, como el también Judas, Dave Holland, que resultó ser un pederasta y condenado como tal, cuando estaban a punto de sacar disco, en un trabajo en solitario de Iommi “The 1996 DEP Sessions”. La era más importante desde entonces fue la de Tony Martin, con quien hizo “The Eternal Idol” o “Headless Cross”. Reconoce que no existió la misma química que existió con el cuarteto original, o con Dio en la época de “Heaven and Hell”.

Nos cuenta los problemas sucedidos con Patrick Meehan, de cómo les engaño en los setenta y, años más tarde, durante la grabación de “The Eternal Idol” lo volvió a contratar, para que volviera a jugársela.

Nos cuenta sobre sus cuestiones sentimentales, incluyendo la entrada de su primera esposa en una secta escocesa, y la aventura con Lita Ford, que acabó cuando ella, que tenía a Sharon Arden como manager, grabó “Close My Eyes Forever” con Ozzy. También ha sido culpable de crear innecesarios momentos de polémica, como cuando en un Ozzfest, durante “War Pigs” aparece George W. Bush con nariz de payaso emparejado con Hitler.

También nos cuenta momentos sociales varios, como cuando son invitados los Black Sabbath originales para las fiestas del cincuenta aniversario de la coronación de la Reina Isabel II. Donde el primer ministro Tony Blair se declaró fan de Sabbath, y poseedor de sus discos y otros momentos entretenidos del evento.

En definitiva, Tony Iommi nos lleva por la historia de la discografía de Black Sabbath, contándonos los pormenores de cada uno de los trabajos de la banda, las causas, los puntos flacos, y gordos. Por ejemplo del “Sabotage” creado tras la traición de Patrick Meehan en el 76, para pagar a Hacienda. Un disco que Zappa declara como favorito por poder percibir la rabia contenida en las notas de sus canciones. O sobre el siguiente disco, que parece que le puso a él en un éxtasis técnico, en el que no entraron los demás, o el “Never Say Day” que supuso el fin de una era. Claro, que si vemos el merchandising de entonces, y comparamos con el de “13”, disco actual, podemos ver que es el mismo. Vamos, la camiseta es la misma para la gira de 1979 que para 2013, camiseta que exhibe Robert Downey Jr. en su papel como Ironman en “The Avengers”. Por razones evidentes este último disco no aparece en el libro, aunque desvela que existe un acuerdo para un nuevo disco.

El libro se extiende hasta “The Evil You Know” de 2009, último trabajo con Dio, ya con el nombre de Heaven and Hell como banda en vez de Black Sabbath para la formación con éste y con Apice. Y donde nos cuenta los momentos de la lucha a muerte de Dio con el cáncer. No olvidemos que el libro sale poco antes de conocer que él mismo tiene cáncer.

El libro termina con el compromiso de no volver a quemar a su amigo Bill.

Octavio Almendros