Amado Storni © Ed. Círculo Rojo.
Basta leer cualquier publicación sobre rock (incluida ésta) para, tarde o temprano, darse de bruces con un análisis, normalmente pesimista, sobre la situación actual en España de la música en general y del rock en particular. También hemos volcado nuestras opiniones sobre asuntos como la SGAE, el pirateo, la baja asistencia a los conciertos y la agonía de las ventas de discos.
A quienes en mayor o menor medida les interesen estos temas y tengan el suficiente amor por la música como para que esta decadencia de la industria musical les preocupe, este libro les apasionará.
En él, Amado Storni (periodista, escritor y poeta) ha recopilado las opiniones de un buen puñado de músicos en torno a este tema, mostrándonos la visión de uno de los colectivos más afectados por este problema: los propios músicos.
La nómina de personajes entrevistados en el libro es tan extensa como bien elegida: Uge (Extremoduro); Kutxi Romero (Marea); “El Drogas” (Barricada); Juankar (Boikot); Armando y Carlos de Castro (Barón Rojo); Salvador Domínguez (Banzai); Javier Vargas; Txus (Mago de Oz), Juan Márquez (Coz); Boni, Alfredo Piedrafita e Ibon Sagarna (Barricada); Fernando Madina (Reincidentes); Manuel Martínez (Medina Azahara); Ramoncín; Luis García (Sobredosis); Fortu (Obús); Niko del Hierro (Saratoga); Sherpa (Barón Rojo); “El Bode y Manolo Benítez (Porretas); Johnny Cifuentes (Burning); Ricardo Lázaro (Calibre Zero); Charly Domínguez (Los Suaves); Julio Castejón (Asfalto); Lele Laina y Jose Luis Jiménez (Topo); Juanjo Melero (Sangre Azul); Javier Mira (Tritón, Punto de Mira); Ángel Arias, Manolo Arias, José Martos e Ignacio Prieto (Atlas); Frank (Mago de Oz); Carlos Pina, Fernando Díaz Valdés y Rafael Ramos (Pánzer); Leonor Marchesi y Juan Revilla (Onliryca), José Carlos Molina (Ñu), José Luis Rodríguez (Isthar); “Moro” (Censurados); Valentín del Moral “Chino” (Banzai); Tibu (Banzai); Jorge Salán; Silver (Muro); Luis Masot (Taifa); más los periodistas Mariano Muniesa y Vicente “Mariskal” Romero.
Se da la circunstancia de que “El Drogas” aparece 2 veces, una en septiembre de 2011 como miembro de Barricada y otra en octubre de 2012 como parte de Txarrena. Algo similar ocurre con Javier Vargas, quien habla en octubre de 2011 como parte de Vargas, Bogert, Appice & Shortino y en octubre de 2012 ya en solitario.
Todos ellos dan su visión particular de los asuntos inicialmente expuestos, así como en algunos casos también aportan reflexiones sobre sus propias carreras personales. Está claro que cada uno cuenta las cosas según su propia experiencia, y no hace falta estar de acuerdo en todas las opiniones vertidas, pero es realmente interesante conocer los puntos de vista de todos ellos.
Las entrevistas son bastante breves, una de las consecuencias de la cantidad tan elevada de personajes entrevistados. Es una de las pocas cosas que no me gustan del libro, ya que echo de menos que cada uno de ellos se explaye más en profundidad, dado que son músicos con mucha historia a sus espaldas. Dicho esto, entiendo que se hayan tenido que recortar las entrevistas para evitar tener que publicar un tomo que hiciera palidecer a El Quijote. También es de agradecer que el propio Amado Storni se limite a funciones de hilo conductor de las opiniones ajenas, dando pie y a veces pequeña réplica a las opiniones de los músicos, verdadero valor de interés en el libro, evitando competir con sus propias opiniones personales.
De entre todas las entrevistas, las hay que apenas vierten información relevante y otras, sin embargo, sueltan verdades como puños que ayudan a comprender la crisis del sector. Personalmente, la que más me ha gustado es la entrevista a José Carlos Molina. Siempre sin pelos en la lengua, muestra su opinión sin tapujos, incluida su visión de su polémico paso por el festival Leyendas del Rock en 2009.
De la lectura del libro se puede extraer el sentir mayoritario de los músicos entrevistados en varias cuestiones:
1. La práctica totalidad de ellos coincide en que casi cualquier tiempo pasado fue mejor, en cuanto a asistencia a conciertos, ventas de discos y seguimiento del rock por los aficionados.
2. Que la SGAE es un organismo necesario y que debe ser impulsado, dejando atrás el mangoneo delictivo de sus últimos dirigentes.
3. Que el campo libre de las descargas ilegales ha matado la industria del disco.
4. Que en España falta cultura musical por parte de la mayoría de la población.
5. Que los medios de comunicación masivos ignoran al rock.
6. Que nuestros gobernantes no tienen el menor respeto por la música, y que sus acciones (subida del IVA, impuesto de lujo en los instrumentos, falta de apoyos institucionales, etc.) sólo suponen más trabas para subsistencia del sector.
Además de estas cuestiones, son también muy interesantes las opiniones personales de cada músico sobre avatares de sus carreras personales. De nuevo echando en falta más extensión en sus comentarios, nos permiten entender un poco más los motivos del funcionamiento y separación de sus grupos.
El libro cuenta, en su parte central, con una bonita galería de fotos de varios de los personajes entrevistados, en su mayor parte cedidas por fotógrafos de diversos medios de comunicación rockeros, más algunas instantáneas hechas por el propio Amado Storni, y se cierra con la carta de presentación de Anton Reixa a la SGAE, información sobre José Luis Acosta (nuevo presidente de la SGAE) el informe sobre el reparto de Copia Privada del 4º trimestre de 2012.
Si te preocupa el estado del rock en España, y quieres conocer la opinión de sus grandes protagonistas, no dejes pasar este libro, ya que ayudará a tomar consciencia de cómo están las cosas.
Santi Fernández «Shan Tee»