Primer día del mes de junio, calor insoportable y la mayoría de los estudiantes enfrascados con los exámenes. Con el sugerente y llamativo título de “Tómate un Rockspiro” (dirigido a l@s aplicad@s que devoraban los libros y apuntes para los exámenes) se celebraba el primer festival con este nombre. EL personal no respondió como era de esperar, muy poca gente se congregó aquella tarde-noche. O estaban estudiando como posesos (aunque no toda la gente es estudiante), o no le atraía el apoyar a grupos que empiezan, o ni se enteraron del evento por la poca publicidad que se hizo del concierto. El cartel era atrayente para servidor, con cuatro formaciones procedentes de distintas partes del estado y con un precio muy asequible (7 “eurogallos”).
Llegué a la sala a buena hora, pero el concierto no había dado comienzo aún (¿algún día empezarán los conciertos en “Ritmo & Compás” a la hora indicada?, lo dudo). En el pasillo que hay antes de la taquilla conocí personalmente a Marcial (cantante de Metrópolis VI), me pareció un tipo agradable y enrollado. Hablamos durante un corto periodo de tiempo y me informó que el primer disco de la banda, ”Saltos en el tiempo”, no saldría ese mes (como se tenía previsto), la compañía prefería ponerlo en circulación en el mes de septiembre.
El joven sexteto malagueño fue el encargado de abrir el festival. Presentaban su primera obra discográfica en el mercado, “Redención” (2002) con portada del reputado dibujante Ciruelo Cabral y editada por la compañía Goimusic. Anteriormente habían grabado dos maquetas en los años 1999 y 2000, bueno, en realidad fue la misma grabación de tres temas, “Armagedon”, pero con distinta portada.
El segundo corte de su disco, “El país de la guerra”, era el que eligieron para comenzar su descarga. La batería del buen aporreador Rafa Fedriani sonaba demasiado alta, no dejando escuchar los demás instrumentos con claridad. Algo mejoró el sonido durante el concierto, pero sin llegar a oírse en perfectas condiciones.
Prosiguieron con dos temas en el mismo orden que en el CD (tercer y cuarta pista), “Lejos de aquí” con principio de teclas, desmelenamiento del cantante Jaime García al quitarse la coleta y el bajista Israel Fuentes sin parar de menear la cabeza, moviendo su rizada melena al ritmo de las composiciones del grupo. “Libertad”, predominio de nuevo del teclado al principio del tema tocado por Germán Villén que hace que las composiciones Heavies del grupo tengan toques y ambientes progresivos. Al guitarrista Marcos Escaño con su gran guitarra y gafas de sol durante todo el concierto, parecía que lo hubieran clavado en el escenario. Apenas se movía.
La extensa “La voz de Nostradamus” era la siguiente composición, bueno, decir que la gran mayoría de temas del grupo son de larga duración. El simpático guitarrista Fito Vergara tuvo problemas con su instrumento durante una parte de la canción. El sonido fue caótico en esta pieza y el cantante al final no llegó a las notas altas.
Continuaron con “Otra dimensión” y “Casino”, alargando Jaime García las notas al final, cumpliendo aquí a la perfección. Comentar que en algunos tonos, Jaime recuerda a Víctor García (ex–Avalanch y ahora en Warcry). Cerraron con la veloz y cañera “Armagedon”.
Los “boquerones” me agradaron. Les falta todavía un poco más de tablas y experiencia, pero si continuan trabajando pueden llegar a conseguir algo. Se salen de la corriente imperante en el panorama del Heavy español al dotar a sus composiciones con esos toques de teclado progresivo muy logrados.
VALHALLA
Tras unas cervecitas me dispuse a ver al segundo grupo de la cita, Valhalla. Los vascos venían con su segundo trabajo “Once upon a time…” (2001), con una horrosa portada, realizada por el conocido dibujante Derek Riggs y editado por Zero Records. Fueron el combo que más gente delante del escenario congregaron, movieron, más respuesta tuvieron y los que más gustaron del festival a algun@s, porque para mi fueron un soberano tostonazo.
El quinteto abrió con “Ride Of Norsemen”, con inicio semejante a Helloween y durante el tema sonido a Manowar, composición que aparece en su último trabajo y que también formó parte de la primera maqueta “Guardians of Metal” (1998), de los que sólo quedan de esa época el batería y los guitarristas. Coros de estos, Ignacio “Jevo” Garamendi y Mikel Martínez. Empalmaron con “Metalopolis” y siguieron con “The Outlaw”, esta vez haciéndose cargo de la mayoría de coros Jevo, como en los siguientes temas.
El cantante Javi “Patxa” Navarro se despoja de su chupa de cuero con flecos para afrontar “Resurrection (Shadow Of The King Part II)”, con grito final a lo Rob Halford. “Born By Metal” prosiguió, con cánticos en el tema y presentación por parte del cantante de Mike en su solo de guitarra. Saludos a los foreros de Rafa Basa, buena parte del apoyo durante el concierto de los de Bizkaia fue por parte de ellos.
Descargaron “Humans”, con sonido y velocidad cual grupo “alemán”, incluyendo la presentación del guitarrista Jevo y que junto a Mike se unieron en escena en el doble solo de guitarra. Otro corte más de su reciente obra, el hímnico, por título y por desarrollo del tema, “Hymn Of Victory”, y esta vez le tocaban presentar al bajista “Txefi”, ataviado durante todo el concierto con un pañuelo en su cabeza, última incorporación al grupo tras la publicación del nuevo CD (el bajo lo grabaron en el estudio Jevo y Mike). Cánticos con el público.
Continuaron con un tema antiguo de su primera maqueta y que también apareció en su primer disco, “Beyond the underworld” (2000), “Guardians Of The Flame”, con estilo 100% europeo del momento y en el cual presentaron al batería Iván. Llegaban al final y lo hicieron con una versión de una de sus influencias, los americanos Manowar, “Hail And Kill”, presentando Jevo al único miembro que quedaba por nombrar durante la descarga, el vocalista “Patxa” y que cambia el grito alargado de Eric Adams. Final del tema al más puro estilo defensores del “True Metal”, bajo junto con guitarras alzadas al aire y restregando los mástiles. Se despidieron comentando que esperaban vernos pronto en su espectáculo de hora y media, ¡buffff!, podría ser soporífero para el que suscribe.
Mis conclusiones son que es un grupo que no aporta absolutamente nada nuevo, pero eso no es inconveniente, hay formaciones que no hacen nada del otro mundo y me gustan sus temas, pero estos vascos además de usar todos los clichés más que manidos del Heavy Metal sus composiciones son vulgares, el tono del cantante no me gusta nada y durante el concierto pensé que eran como muchos grupos “alemanes” que nos intentan vender como grandes y que son de segunda división, pero es que a Valhalla ni los metería dentro de la segunda.
Ya con los terceros de la tarde-noche me acompañó con su presencia el amigo y forero Anaxides, que tiene más peligro cuando sale de fiesta que Espinete en una fiesta de globos. Segunda oportunidad que tenía de ver a los madrileños. Y para mi es una gozada poderlos ver descargando sus temas de Hard/A.O.R. progresivo de bella factura, con muchos detalles y muy bien trabajados. Aunque poca expectación crearon, debido a que mucha de la gente congregada allí no los conocía y porque su estilo tampoco es para pegar muchos botes.
Su primeras “coplas” aquella noche fueron “Reflejos” y “Por qué no”, temas que integrarán su primer trabajo a editar en el mes de septiembre (como anunció el cantante Marcial Ortiz), junto con otros nuevos y otros de su primera maqueta editada en el 2001. En la segunda canción Marcial cedió el micrófono a un chaval para que cantara el estribillo, al igual que lo hizo con el sonriente guitarra Dani Pereira.
Problemillas en el micro del cantante (¿qué haces con los micros, Marcial?, la anterior vez que os vi también pasó algo parecido) rápidamente subsanados. Ahora correspondía un “vistazo” a su maqueta con “Quisiera volver” con un estupendo solo de guitarra por parte de Dani. Siguieron con el tema que abría la demo, “Hay algo”, con jugueteo del cantante con la batería.
Comentario cachondo de “Operación Truño”, y gritos para animar a la peña por parte de Marcial, que estaba muy parada, aunque como anteriormente he dicho, tampoco hacen una música para desfasar. Nuevo tema, “Destino”, con un comienzo muy místico y un final sonando a Dream Theater. Agradecimientos a los foros de música de MariskalRock, Rafa Basa y… sí, a nosotros también, The Sentinel, nos lo agradeció Marcialín, muchas gracias por parte de todo el equipo de la página y de la gente y los foreros que nos visitan todos los días, porque sin ell@s esto no tendría sentido.
También dio las gracias al joven guitarrista Jorge Salán y a Kiko Hagall (nuevo cantante de Beethoven R.), que estaban por allí viéndolos.
Y con la participación de Kiko hicieron “Vértigo”, con toques que me recuerdan a Deep Purple y continuado por “Mi lugar”, momento que se aprovecha para presentar al grupo: Jorge a las teclas, Manolo a una guitarra, Iván a la batería, Dani a la otra guitarra y Dani al bajo. Parecía que habían acabado, pero al ratillo salieron para interpretar “Saltos en el tiempo” (título que también será el de su próximo CD), de nuevo con participación de Kiko.
Buen concierto de Metrópolis VI y espero que cuando saquen el disco la gente responda comprándolo, aunque, ojalá me equivoque, no hacen un estilo que tenga mucha respuesta en nuestro país. Más dado a consumir lo que nos venden los medios tanto en televisión, revistas y radios sea del estilo de música que sea (incluido el Rock en todos sus estilos), una pena, oiga.
Los últimos que cerraban el festival eran los malacitanos Siddharta con su excelente Hard Rock, cuyo nombre está sacado de una obra de Herman Hesse sobre la búsqueda del ser humano tras la verdad. Si la afluencia de público a la sala fue poca, viendo a los malagueños nos quedamos en familia. L@s que se marcharon se lo perdieron.
Como comienza su CD, “Octubre” (2001), con “Títere”, así nos deleitaban los odios al principio. Menudo temazo, en el cual ya Fernando Pleite nos demostraba que en directo es igual de excelente vocalista, o incluso mejor, que en disco. Dirigió el micrófono al público para que cantáramos el estribillo. Tras “Vértigo” comenta el vocalista que han dormido solamente dos horas y han tenido problemas con la furgoneta. Pues cómo cantará cuando esté en óptimas condiciones este vocalista, tiene que ser la bomba. Durante “Rock & Roll” hubo un corte por problemas con el maldito micro. Y cuando tocaban “Desistiré” el alto guitarrista rítmica, que utilizan para los directos, desenchufó su instrumento sin querer.
Futuro del grupo con “Michel” y pasado con “Azul”, tema que no está en su disco. Buenas canciones, al igual que todas las que componen su trabajo. Prosiguieron con el precioso “(M.U.A.)” siglas de “Mi Último Adiós” y con el que Fernando presentó a la banda: uno de los nuevos, David a la batería, el bajista Paco Martín, el guitarrista rítmica Salvador Mota y el otro guitarra Daniel Ruiz. Impresionante grito final del cantante.
Recordando a “Nadia” (tema que trata de una prostituta) hubo juego de voces con el público, continuando con el tema título del disco, “Octubre” con unos molestos acoples durante la interpretación. El fin de fiesta vino recordando a Led Zeppelin, el grandioso “Rock´n´Roll”.
Me gustaron bastante, a pesar de los pequeños problemillas que tuvieron, aunque hay que darles un palo por lo estáticos que estuvieron, a excepción del vocalista que era el que animaba, porque los otros componentes eran muy sosos, el guitarrista Daniel parecía muy tímido, sin apenas dirigir la mirada al público. Un grupo a tener muy en cuenta, espero que saquen pronto su nuevo disco, igual o con más calidad que el primero.
Texto: Starbreaker