TIMELESS “Illusions of a broken mind” (2018)

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¿De cuántas maneras puede prepararse un arroz? Prácticamente infinitas. No sólo existen multitud de recetas distintas sino que, además, cada una de ellas tendrá el toque único de quien lo cocina. A partir de ahí, los comensales degustaremos el contenido de los platos y, aun gustándonos más unos u otros, la digestión del arroz es algo a tener muy en cuenta. Dependiendo del tipo de arroz, la cocción y los condimentos, puede devenir un plato muy ligero o realmente pesado. En cuanto a gustos, hay apuestas seguras como el arroz a la cubana, que gusta a casi todo el mundo y es poco exigente en la cocina. A partir de ahí, el cocinero puede experimentar y complicarse la vida tanto como desee, con resultados a veces muy aplaudidos y a veces rechazados por disgusto o incomprensión. Los comensales (nosotros), en ocasiones debemos tener paciencia y acostumbrar al paladar a nuevos sabores o a combinaciones que nos resulten extrañas al principio. Seguro que a todos os ha pasado alguna vez.

Ahora imaginad que substituimos el arroz por la música. O, para ser más precisos, por el rock duro, el heavy metal o como queramos llamarlo. Hay apuestas más “ganadoras”, normalmente no excesivamente complejas, con canciones que puedes escudriñar sin excesiva dificultad y que, en seguida, abrazas o rechazas. Me suelen gustar esos menús. Sobre todo si me apetece tararear o si comparto cerveza con los amigos. Otras veces, como la que es objeto de esta reseña, rápidamente me doy cuenta de que esa música va a requerir una especial atención por mi parte si quiero comprenderla y analizarla como es debido. Reconozco que, a veces, darme cuenta de eso me da cierta pereza porque no sé si esa escucha atenta va a reportarme la deseada satisfacción emocional que espero cada vez que doy al play por primera vez.

Voy a compartir con vosotros mis sensaciones tras numerosas y atentas escuchas de este “Illusions Of A Broken Mind”. Timeless son de Rubí, localidad cercana a mi Barcelona, y este CD que hoy reseño para The Sentinel es su primer LP tras un EP anterior que sacaron en octubre de 2017, titulado “Vol. 0” y que contiene, entre otras, dos canciones que también están presentes en este disco, editado justo un año después a través de The Fish Factory, que son “American Psycho” y “Believers Into The Silence Of The Moon”. La banda la forman Andrés Velarde y Javier León (guitarras), Óscar Ortega (bajo), Jordi Jáimez (batería) y Héctor Llauradó (voz), a su vez ex cantante de Delaware, Hypnoside y Prisma.  Son voces invitadas Javi Gianno (Cyan Bloodbane), Elisa C. Martín (Hamka, Dreamaker, Dark Moor), Sergio Bermúdez (Lyra Mortem) y Alberto Román (Amadeüs) mete un solo de guitarra en “Swimming To My Heaven”.

Mis sensaciones han sido altamente positivas. “Illusions Of A Broken Mind” gana con cada reproducción del CD en su totalidad, pidiendo (eso sí) atención y tiempo para ser degustado. Hacer referencia a Dream Theater, Symphony X o Queensryche se hace inevitable para poderos trasladar algunos trazos de las influencias más presentes en Timeless, aunque los catalanes son más oscuros, tanto en la ambientación general del disco como en el tratamiento de las voces que incluyen incluso algún que otro gutural. Las canciones, como no podría ser de otra manera en un disco de estas características, son técnicas y elaboradas, quedando en el top tres de un servidor la que abre el disco tras la introducción, “Sacred Names”, “Point Of No Return”, que es en la que participa Elisa C. Martín y la que cierra el LP, “Swimming To My Heaven”, que es quizás la que os recordará más a Dream Theater de todo el disco.

Estoy convencido de que este disco gustará a quienes disfrutan del metal técnico que no olvida la melodía y que buscan un punto rudo que va más allá de los estándares que más habitualmente encontramos en el metal progresivo. Timeless son ya para mí un notable descubrimiento y pienso seguir su trayectoria con atención.

Jebimetal