HEREJÍA “La quinta herejía” (2019)

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Hace cosa de un mes, recibí en mi casa para reseñar este segundo disco de los cántabros Herejía. Aunque me sonaban de nombre, no los había escuchado nunca antes excepto por una canción de este nuevo álbum que pude oír de pasada en un programa de radio. Recuerdo que esa canción me llamó la atención lo suficiente como para introducir el CD en el reproductor y darle al play con la curiosidad despierta por saber a qué sonaría “La quinta herejía” y, debo decirlo, las sensaciones han sido muy positivas.

Para poner en contexto el segundo disco, y una vez ya lo había escuchado y reescuchado lo suficiente como para poder escribir una reseña en condiciones, quise darme un paseo por su primer disco, salido tres años antes, llamado “Despierta” y que puede encontrarse en su totalidad en Youtube. Aunque por razones obvias de prioridad no le he prestado la misma atención a “Despierta” que a “La quinta herejía”, un par de escuchas son más que suficientes para ver el gran salto adelante que se ha producido en los tres años que separan ambos trabajos. No sólo en composición y ejecución, sino también en la producción.

Componen y ejecutan en Herejía Kike “Rizos” (voz), Borja y Rubén (guitarras), Antonio “Turu” (bajo) y Johnny (batería), así como las voces colaboradoras de los grupos Söllen, Blast Open, Arenia y Monasthyr. Es una pena que el libreto sea pobre o descuidado en créditos, ya que no se mencionan los nombres de los colaboradores o los apellidos de los miembros de Herejía, dificultando su reconocimiento, trazabilidad y seguimiento de su trayectoria. Para los que somos de degustar los formatos físicos y manosear el libreto, estas cosas tienen interés o, al menos, lo tienen particularmente para mí.

El disco ha sido grabado, mezclado y masterizado en los Estudios Dynamita por Dani G.. Si recordáis mi última reseña para esta web, en la que comenté el tercer LP de los asturianos Arenia, decía que ese trabajo había sido realizado también en los Estudios Dynamita por Dani G. y que no había logrado identificar al productor porque, para mí, una “G.” me puede servir como marca pero no como elemento para identificar fácilmente a una persona. Tras volver a indagar por la red de redes, he podido comprobar finalmente que se trata de Daniel González Suárez, músico asturiano al que conozco por ser o haber sido la voz de grupos como Nörthwind, Darksun o Edén entre otros muchos, además de guitarrista y productor musical, faceta esta última que viene desarrollando cada vez con mayor profusión y reconocimiento.

“La quinta herejía” suena a Heavy Metal y ya está. Sin más apellidos que añadir. Si eres seguidor de los Judas Priest de los primeros 80, existen bastantes posibilidades de que disfrutes este LP. “Pangea”, la intro instrumental con la que arrancan el disco, bien puede recordaros a “The Hellion”, aquella otra mítica intro que abre uno de mis discos preferidos de los ingleses. Tras la introducción, suena la canción que da título al disco, un tema potente que cumple su función de colocarnos las orejas apuntando en la dirección adecuada.

Tras “La quinta herejía” suena “Hasta morir”, un medio tiempo muy ochentero que es toda una oda a nuestra música preferida y con un estribillo de los que invitan a ser coreados en los conciertos. Seguidamente suena “Tu nombre”, canción que, como todas las del disco, está bien aunque no la ubico entre las más interesantes del redondo. Mucho más me ha llamado la atención “Soy como soy”, una declaración de principios del personaje que protagoniza la canción, muy melódica, con un buen juego de guitarras y otro buen estribillo. En “Libre” tenemos a otro personaje que clama su derecho a salir y disfrutar con toda libertad, una canción divertida aunque también baja un peldaño en el valor global del disco. Sin embargo, “Ahora yo”, balada del disco y canción que sucede a la mencionada “Libre”, sin ser un temazo sí que tiene una progresión muy interesante y una letra que gira en torno a la capacidad personal de reinventarse, aceptarse, tener los pies en el suelo y dar lo mejor de uno mismo.

Encaramos la recta final del disco con un trío de buenas canciones. Mi favorita de todo “La quinta herejía” es “Resurrección”, una de las más cañeras, muy meneadora de cabezas y con un estribillo de los de cantar a pleno pulmón. Los Iron Maiden de “The Clansman” o “The Clairvoyant” nos vendrán a la cabeza con el bajo que suena en el inicio de “El viaje más largo”. Esta canción me sirve de ejemplo para volver a referirme a la mejora que he observado entre este disco de Herejía y su predecesor, haciendo hincapié en este caso en el cante de Kiko quien, si en “Despierta” le he percibido incluso algo fuera de tono en alguna ocasión, en “La quinta herejía” lo clava sacando lo mejor de sus capacidades vocales, siendo esta canción uno de los mejores ejemplos. Llegamos al final del disco con la canción más larga de todas, más de 7 minutos, llamada “Te quiere atrapar”. Un buen tema de heavy metal que sabe combinar melodía pegadiza, finas guitarras dobladas y dosis de buena caña.

Para mi gusto particular, “La quinta herejía” de los cántabros es un disco de notable alto, siendo un salto enorme respecto a su predecesor. Si para el tercero son capaces de componer un disco entero en la línea de las mejores canciones que tiene este segundo, manteniendo la calidad interpretativa, con una producción en la misma línea pero dando un pelín más de presencia al bajo, pueden darnos tremendas alegrías. De momento, prometen mucho.

Jebimetal